Liderazgo «On the Floor», el rol del supervisor de producción y las 6 misiones de manager
Una palanca clave para generar competitividad a través de la transformación industrial, más allá de mejora de operaciones y procesos o de digitalización de sistemas, es la palanca del liderazgo “on the floor”. El liderazgo "on the floor" de un supervisor de producción en una fábrica es un aspecto clave para el éxito de las operaciones diarias.

Date

Autor

Comparte

A diferencia de la gestión más estratégica de una compañía, normalmente ejercida en posiciones más alejadas del principal flujo de valor, el supervisor de producción trabaja directamente en la planta. Esta cercanía al terreno les permite interactuar con los operadores, gestionando problemas en tiempo real y asegurando que los objetivos de producción se cumplan de manera eficiente.

Este tipo de liderazgo requiere habilidades técnicas necesarias. Se precisan de métodos y herramientas que permitan al supervisor ejercer su rol de forma eficiente. Además de ello, también las habilidades blandas como una comunicación efectiva y la capacidad de tomar decisiones rápidas bajo presión juegan un papel clave.

¿Qué es el liderazgo «On the Floor»?

El liderazgo «on the floor» se refiere a un estilo de liderazgo en el que el supervisor está presente físicamente en el lugar de trabajo, interactuando en el terreno con los empleados y los procesos de producción.

Este enfoque le permite estar al tanto de las desviaciones operativas, identificar problemas en tiempo real y tomar medidas correctivas de inmediato. Con este modelo de liderazgo o supervisión, aseguramos conseguir unos resultados óptimos a corto plazo y que aseguren una previsión de resultados fiables a medio y largo plazo.

Las “6 Misiones del Manager” fundamentales

La supervisión activa sobre el terreno implica dotar al responsable o encargado de herramientas y metodologías de trabajo basadas en 6 pilares básicos:

  1. Organizar el trabajo de su equipo: Optimizar el uso de los recursos de qué dispone para poder garantizar la operativa del su turno de trabajo en tiempo y forma.
  2. Asegurar normas y estándares de trabajo: Es el encargado de asegurar que los operarios y técnicos sigan los procedimientos establecidos y trabajen de manera segura y eficiente. Dentro de esta palanca, existen las SOP’s, las Auditorias de Puesto, manual de conductas…
  3. Desarrollar skills y experiencia: para poder garantizar que la producción sale a tiempo, el supervisor de producción debe mantener unos conocimientos homogéneos en su turno de trabajo. Elementos como skills matrix y una buena rutina de evaluación y feedback anual son necesarios para ayudar al supervisor ejercer el papel adecuado.
  4. Gestionar el rendimiento del proceso: El supervisor tiene la responsabilidad de cumplir con las metas de producción diarias, semanales o mensuales, ajustando las prioridades de trabajo según las necesidades. Es imposible ejercer un papel excelente en esta palanca sin un sistema de gobierno adecuada basado en rutinas de fábrica, rutinas TOP, dashboad de proceso, visual management, hoshin kanri…
  5. Emprender y Resolver problemas: En la fábrica, los equipos y las máquinas pueden fallar, lo que requiere que el supervisor tenga conocimientos técnicos suficientes para identificar problemas y coordinar su solución de manera rápida a través de metodológia de mejora continua y resolución de problemas, como las dinámicas Quick Kaizen.
  6. Motivar y colaborar con el resto de las áreas: como si de un acordeón se tratase, la función de supervisor engrana la visión estratégica con la táctica en las operaciones.

La Importancia del Liderazgo «On the Floor» y la eficiencia de la producción

El liderazgo sobre el terreno tiene un impacto directo en la eficiencia y la productividad del proceso. Un supervisor competente puede mejorar significativamente el flujo de trabajo, reducir el tiempo de inactividad y maximizar la calidad del producto a través de orientar, alinear y organizar su equipo.

En resumen, el liderazgo «on the floor» de un supervisor de producción es crucial para el éxito de las operaciones diarias en una fábrica. Al combinar habilidades técnicas, de gestión y de comunicación, el supervisor puede influir positivamente en el rendimiento del equipo, la calidad del producto y el cumplimiento de los objetivos de producción. Su presencia en el terreno es esencial para garantizar que todo funcione de manera fluida, resolviendo problemas a medida que surgen y manteniendo el enfoque en el cumplimiento de las metas a corto y largo plazo.

En otro artículo profundizaremos en las dificultades y requisitos necesarios para que esta figura desempeñe un papel excelente en la operativa diaria.